Oficina  >  Mesas de Oficina
 

      
ZENCI
 
-La tendrás. Así lo exigiré, pero tendré que esperar a que las condiciones sean las favorables y adecuadas.

-Y cuándo sucederá eso?-quiso averiguar el principito
 
-Hem! Hem!-vociferó el rey mientras consultaba un grueso calendario-, hem! hem!, será a las... a las... será esta misma noche, exactamente a las siete y cuarenta! Ya veras cómo soy obedecido!

      
COLZADA
 
El principito bostezó al tiempo que lamentaba la pérdida de su puesta de sol, y como ya se aburría dijo:
 
-Ya nada tengo que hacer aquí. Me marcho.

-No te vayas todavía-sugirió el rey, quien estaba muy satisfecho de tener un súbdito- Si te quedas, te hago ministro.

      
IDEA
 
-Ministro de qué?

-De... de justicia!

-Pero a quién podré juzgar?

-Eso aún no lo se-contestó el rey- Debo visitar a mi reino, pero estoy viejo, no tengo suficiente lugar para una carroza y me fatiga caminar.
 
-Yo ya he mirado, por allí tampoco hay habitantes-comentó el principito asomándose a fin de poder observar mejor el otro lado del planeta.

      
PLUSVAN
 
-Podrás juzgarte a ti mismo-replicó el rey- Eso es bien difícil, mucho más que juzgarse a los demás. Te diré más: si logras juzgarte bien a ti mismo, estarás frente a un verdadero sabio
 
-Pero no necesito vivir en este sitio para poder juzgarme a mí mismo-dijo el principito-, eso puedo hacerlo en cualquier parte.